¿La música mueve emociones?
A través de nuestra metodología Smart Education trabajamos de forma especializada en cada uno de los campos que forman, la Educación Inteligente. Entendemos que son muy importantes los primeros años de los más pequeños y por ello, una de nuestras herramientas educativas es la música, pues consideramos que es un buen vehículo para dejar aflorar las emociones.
Los niños y niñas tienen un potencial infinito y el primer sentido que desarrollan al nacer es el oíd. Nuestra metodología Lysmon Smart Education apuesta firmemente por la música, pues abre circuitos neuronales que solo esta disciplina puede activar.
La música proporciona claves para el mejor crecimiento, desarrollo y evolución del ser humano. Ella nos permite adentrarnos en el conocimiento de nosotros mismos y de los demás, en la comunicación con nuestros semejantes, en la apreciación del mundo y de sus manifestaciones. Nos invade a cada uno de nosotros y su campo de expresión no conoce límite alguno: puede expresar tragedia, serenidad, alegría, tristeza…
Cuando escuchamos música es importante tener en cuenta el estado emocional. Existen muchos juegos dedicados a los niños y niñas en los que se utiliza la música para enseñarles a comunicarse en un nivel profundo y gratificante, ayudándoles de este modo a salvar el intrincado laberinto de las relaciones con los demás.
Podemos trasmitirles muchos valores al jugar con la música. Escuchar estructuras armónicas complejas o simplemente «diferentes», es una actividad que aumenta la capacidad intelectual del oyente, incrementa el desarrollo de la creatividad y, por consiguiente, favorece el aprendizaje y el sentido crítico.
En Lysmon creemos que la música, no sólo está indicada a los más pequeños, sino que es una herramienta fundamental para padres y educadores en general, ya que es el mejor transporte a cualquier aprendizaje de forma lúdica.
Lysmon, la Educación Inteligente.
